A la camita

Tips para ayudar a dormir a tu hijo grande, cuando llega un hermanit@

Muchos son los cambios que pueden generar una regresión en lo maravilloso que dormía nuestro hijo: enfermedades, viajes, escuela nueva, etcétera. Pero un niño que ya aprendió a dormir y tiene la habilidad de hacerlo por sí mismo suele volver a su buen ritmo en días, siguiendo rutinas o retomando el método que aprendió con A la Camita.

Un evento que causa especial caos y es muy entendible, hasta en niños con el súper poder de dormir, es la llegada de un nuevo hermanito. Aquí es cuando los berrinches suben de nivel o todo lo que habíamos avanzado con el mayor en cuanto a mamila, chupón o pañal, regresa. Es más, casualmente suceden peticiones urgentes “EN ESTE INSTANTE, MAMÁ” justo en el momento de dar de comer al nuevo bebé.

Las regresiones en este momento son completamente normales; por lo que no se sorprendan si el sueño se ve afectado. Si tu hijo mayor se para frecuentemente en las noches, regrésalo a su cama. No lo regañes, pero tampoco te enganches, sólo pacientemente, devuélvelo a su camita. Si lo despertó el ruido del nuevo bebé, explícale que está todo bien, que los recién nacidos tienen que despertar para comer, pero que pronto dormirá toda la noche como él.   Si ya está en una edad que entiende, recuérdale esto en el día.

Si para dormir, cada vez necesita más y más atención de tu parte, recorre la rutina y hora de acostar un poco, así tendrá tiempo de bajar la pila y pasar un momento de más apapacho contigo. Esto funciona especialmente si hay ayuda en casa. Es importante involucrarlo en la rutina del recién nacido, que le “lea” un cuento antes de dormir, a lo mejor mientras das de comer al bebé, lees el cuento de “grandes”, que te pase pañales, ayuda a limpiarle la cara, en el baño, etc. Procura dedicar unos minutos diarios con tu hijo grande; no tienen que ser mucho; 15-20 minutos; pero un momento especial en donde NADIE lo va a molestar; son sólo tú y él.

Si el nuevo bebé duerme en tu cuarto los primeros meses, explícale el plan al grande: son unos meses en lo que deja de comer tan seguido y luego se irá a su cuarto o al cuarto con su hermanit@.

Si colechabas con tu hijo mayor, ¡NO lo saques del cuarto para que entre el nuevo! Utiliza una cunita aparte o de las que se anclan en la cama, pero no le sumes al momento, sentimientos extra de desplazamiento.

Si el plan es cambiar al hijo grande a cama para heredar la cuna, que el cambio sea entre 2 y 6 meses antes de la llegada de su hermanito. Si por situaciones no fue posible; procura que la cuna esté unos meses desocupada antes de que el hermanito la use; así tu hijo mayor no se sentirá desplazado. Recomendamos no sacar de cuna a niños menores a los 2.5- 3 años; por lo que no elimines la posibilidad de conseguir otra cuna(usada o nueva).

Es importante en este proceso, recordarle a tu hijo grande lo increíble que es tener privilegios de ser mayor y seguir en su cama de “grandes”, dormir un poco más tarde, comer galletas. Los sentimientos que está experimentando son completamente normales, reconoce sus sentimientos, y ten paciencia. Eso no quiere decir desaparecer límites; sé muy consistente pero con todo el amor del mundo y esta etapa deberá pasar. Dale mucho apapacho físico y verbal,

Pide a las visitas que hagan el mismo show de emoción al ver al grande que al chico y siempre recordar las reglas:

  • No se toca la cara del bebé y se le trata suavemente.
  • No se le avientan cosas ni se carga sin la ayuda de mamá ni papá.
  • Y por ninguna razón, se despierta al bebé.

Cuando este período pase y tu hijo grande vuleva a dormir, echale muchas porras. Sé muy paciente y empático. Es muy proceso de ajuste para todos en la familia.

Fuente: West, Kim. GOOD NIGHT SLEEP TIGHT. 2010, Serrano, Ana. Ayudando a crecer, 0 a 3 años. 2009

Más artículos de tu interés

WhatsApp